En el mundo actual, la realidad se está moldeando mediante narrativas que nos explican lo que sucede día a día.
Si ocurre un evento global, los medios de comunicación te ofrecerán una explicación casi instantánea. Pero, ¿alguna vez te has detenido a pensar quién está detrás de esas explicaciones? ¿Quién controla la narrativa y, por ende, la realidad?
Las élites mundiales tienen un poder descomunal en la creación de esas historias, las cuales guían la forma en que percibimos el mundo. Para entender hacia dónde se dirige el futuro, no tenemos que mirar muy lejos: basta con seguir de cerca a los filósofos e historiadores favoritos de los poderosos. Uno de los nombres más prominentes es el de Yuval Noah Harari, una figura clave para el Foro Económico Mundial. Sus libros y conferencias trazan un mapa inquietante del futuro que las élites parecen desear para nosotros.
¿Qué nos espera en el año 2030?
Recientemente, Harari compartió en una entrevista su visión sobre lo que podría suceder en el mundo a partir de 2025. Según él, los humanos dejarán de tomar las decisiones más importantes para el año 2030. En su lugar, los algoritmos y la inteligencia artificial (IA) serán quienes decidirán aspectos clave de nuestras vidas. Desde determinar quién consigue un trabajo hasta decidir si un banco otorga un crédito, las IA controlarán cada vez más nuestro destino.
Harari va un paso más allá. No habla de una simple “inteligencia artificial”, sino de “inteligencias alienígenas”, una denominación que parece extraña pero que tiene sentido cuando lo explica. Estas inteligencias no operan como la mente humana; sus decisiones no están guiadas por emociones ni valores humanos. Esto las hace cada vez más ajenas, menos controladas por el hombre y más autónomas. De hecho, podrían estar tomando decisiones que afectan nuestras vidas sin que siquiera lo notemos.
¿Ya está sucediendo?
A medida que más aspectos de nuestras vidas sean gestionados por algoritmos y sistemas automatizados, podríamos estar acercándonos a una realidad donde el poder real ya no resida en los políticos o en los líderes empresariales, sino en las IA que operan detrás de escena. Si bien los gobiernos y empresas aún podrán anunciar sus decisiones, la realidad es que muchas de esas decisiones serán producto de cálculos hechos por máquinas que ni siquiera los humanos podrán comprender del todo.
¿Estamos entrenando a estas IA sin saberlo? Cada vez que interactuamos con ellas, desde los simples asistentes virtuales hasta los algoritmos de redes sociales, estamos proporcionando datos que mejoran sus capacidades. Lentamente, estamos alimentando a un poder que podría, en el futuro, tomar el control de nuestra realidad.
La pregunta es: ¿podemos detenerlo?
Harari deja claro que las élites saben bien cómo usar esta tecnología para su beneficio. Serán ellas las que controlen estas inteligencias, y nosotros solo veremos las decisiones sin saber realmente de dónde provienen. ¿Será este el destino que nos espera? ¿Dejaremos que las “inteligencias alienígenas” tomen las riendas sin cuestionar el rumbo que nos imponen?
Este tema es crucial y merece una reflexión profunda. Quiero saber qué piensas. ¿Crees que la inteligencia artificial ya está tomando decisiones que afectan nuestra vida sin que lo notemos? ¿Estamos, como sociedad, entrenando a un poder que nos gobernará en el futuro sin nuestra intervención? Comparte tus opiniones en los comentarios; las leeré todas.
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Queremos alcanzar la masa crítica necesaria para quebrar este sistema perverso de esclavitud y muerte a todos los niveles.
Sabemos que no es una tarea sencilla pero la unión hace la fuerza, la fuerza hace a la voluntad y con voluntad y fuerza se hace lo que se desea en mente y corazón y así podremos manifestar nuestra realidad. Nur para todos.
